68 CONGRESO AEP. Libro de comunicaciones

1216 ISBN: 978-84-09-42146-6 ÁREA DE ESPECIALIDAD  URGENCIAS PEDIÁTRICAS 2, 3 y 4 de junio de 2022 #54 ESTÁNDAR Intoxicaciones por setas y plantas y su repercusión en pediatría Amaia San Martín Orayen, Sandra Maeso Méndez, Ainara García Oller, Annabel Prigent Diaz, Gaizka Mestraitua Aurrekoetxea, Leyre A. Vilella San Martin Hospital Universitario de Araba-Txagorritxu, Álava INTRODUCCIÓN Y OBJETIVOS En el ámbito pediátrico, la consulta por ingesta de setas o plantas no es muy habitual. Sin embargo, es un reto por la gran variedad de especies existentes y a la diversa posibilidad de toxicidad de cada una de ellas. El objetivo es analizar varios aspectos de los pa- cientes que acudieron a nuestro servicio de urgencias pediátricas tras una posible intoxicación por setas o plantas. MÉTODOS Se realiza un estudio descriptivo y transversal a través de la historia clínica de los pacientes que acu- dieron a nuestro servicio de urgencias pediátricas de un hospital secundario durante 4 años (2017 a 2021), tras una posible intoxicación por estas sustancias. Mediante Excel, se recogen los datos y se realiza un análisis estadístico. RESULTADOS Se encuentran 10 pacientes que hayan acudido a urgencias por este motivo durante este periodo de tiempo. Cuatro de ellos, acudieron tras la ingesta de setas, siendo todos ellos varones con una edad media de 8 años (mediana de 11 años). Todos acudieron en otoño e invierno y recibieron a su llegada un triaje nivel III. Solo uno de ellos hizo uso de una ambulancia para su traslado, acudiendo el resto por sus propios medios. El 75% ingirió la seta en su propio domicilio y acudió a urgencias más de 2 horas tras la ingesta, presentan- do sintomatología y precisando la realización de pruebas complementarias. No se realizó descontami- nación intestinal en ninguno de ellos, pero todos per- manecieron ingresados. Los otros seis (2 niñas y 4 niños) acudieron tras la ingesta de diversas especies de plantas, con una edad media de 2 años y medio (mediana de 1 año). Todos acudieron en primavera o verano mediante sus propios medios. El 50% presentaba síntomas a su lle- gada y recibió un triaje nivel III y el otro 50% perma- necía asintomático y recibió un nivel IV. La mayoría (75%) había ingerido la planta en el exterior y todos acudían pasadas menos de 2 horas tras la ingesta. El 33% de los pacientes precisó pruebas complementa- rias y descontaminación intestinal con carbón activo, permaneciendo a posteriori ingresado en la planta de hospitalización. En ninguno de los 10 pacientes fue necesario el ingreso en Unidad de Cuidados Intensivos. CONCLUSIONES Pese a la baja incidencia de este tipo de intoxica- ciones en pediatría, su potencial gravedad obliga al pediatra a tener presente esta posibilidad y a saber hacer frente, junto al servicio de toxicología, a su diagnóstico y su manejo.